jueves, 23 de febrero de 2012

La huelga ha sido desconvocada


Ayer día 21 de febrero de 2012, se celebró un referéndum en todos los centros de la compañía, un referéndum con el objetivo de aprobar la mediación hecha por la Dirección General de Relaciones Laborales, de la Generalitat de Catalunya.


Decimos aprobar porque se emplearon todas las tácticas necesarias para que el resultado no pudiera ser otro que la aprobación de dicha propuesta.

Prueba de lo que afirmamos es que votaron justamente la mitad de la plantilla y, la mayoría de las personas que votaron, ni estaban afectadas por la reducción de salarios, ni por el futuro de la fábrica de Santa Perpetua. Los trabajadores a los que realmente les afecta la medida votaron el día 18 y votaron NO.

Nos hemos encontrado ante una mediación de la Administración que entiende que “mediar” es aceptar, respecto a la rebaja de salarios, la misma propuesta que inicialmente propuso la empresa. Ni siquiera se cubrieron las apariencias proponiendo que la reducción fuera menor, aunque fuera en un pequeño porcentaje.

Se ha votado afirmativamente una propuesta por aquellos trabajadores que no se ven afectados por ella y se ha obviado el rechazo de los trabajadores que van a sufrir las consecuencias.


Pero la actitud antidemocrática y servil a los intereses de la empresa, en contra de quien verá reducido su salario, no termina ahí, sino que:

Se firma el acuerdo con la empresa unos minutos después del recuento de los votos, en un hotel  y con convocatoria “expres”, previa a la finalización del propio referendum. Los compañeros que firman y que conforman la mayoría del comité intercentros, pero la minoría en el centro afectado saben y conocen que al dia siguiente (22 de febrero) hay una mediación de huelga en el Tribunal Laboral de Catalunya., donde CCOO intenta mejorar la propuesta, pero los compañeros de UGT ya habían firmado y, por tanto, habían dado a la empresa el arma de poder redactar un acta de “no acuerdo” en esa mediación que de llevar a cabo esa huelga la empresa podría considerar ilegal y podría proceder a despedir a quien realmente hemos defendido hasta el ultimo minuto los intereses de los trabajadores.


Ahora UGT se presentará como salvadora de la empresa (nunca mejor dicho) puesto que lo que realmente ha hecho es rebajar el salario a unos compañeros que no representa y a ayudar a la empresa a conculcar el derecho constitucional de huelga.